El Gobierno Nacional ha decidido desautorizar a Camilo González Posso, líder de la delegación de gobierno y coordinador de la mesa de negociación con las disidencias de las Farc. Este inesperado movimiento se produce tras una creciente presión por parte de la comunidad y de varios senadores, incluyendo al Senador David Luna.
El presidente Gustavo Petro, desde Honolulu en Hawái, en una escala técnica del avión presidencial durante su viaje de regreso tras su visita a China, hizo una declaración contundente a traves de su cuenta de X : "Ni el comisionado de paz, ni el gobierno nacional han dado autorización alguna para que el EMC participe en actos de apertura al proceso electoral en ninguna parte del país.
Ni el comisionado de paz, ni el gobierno nacional han dado autorización alguna para que el EMC participe en actos de apertura al proceso electoral en ninguna parte del país.
— Gustavo Petro (@petrogustavo) October 27, 2023
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La decisión de desautorizar a González Posso, se produce luego de que el coordinador de la mesa de negociación había anunciado la participación de las disidencias de las Farc en la apertura de elecciones en Popayán, generando un intenso debate sobre la seguridad y legitimidad del proceso electoral.
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Esta desautorización se fundamenta en el hecho de que González Posso había firmado un comunicado conjunto con las disidencias de las Farc, anunciando su participación en el acto protocolario de apertura de las elecciones en Popayán. Esto generó un intenso debate en el país, con el Senador David Luna cuestionando abiertamente la decisión y argumentando que permitir la presencia de grupos ilegales en un evento electoral iba en contra de las promesas de proteger a la ciudadanía durante la campaña.
Este cambio de rumbo ha generado reacciones mixtas en la sociedad colombiana. Mientras algunos lo ven como una medida necesaria para garantizar la integridad del proceso electoral, otros consideran que refleja una falta de coherencia en la política gubernamental.
La desautorización de Camilo González Posso plantea interrogantes sobre el futuro de las negociaciones con las disidencias de las Farc y sobre la dirección que tomará el proceso de paz en el país. El Gobierno, por su parte, ha enfatizado su compromiso con la seguridad y legitimidad de las elecciones regionales, aunque este episodio sin duda tendrá un impacto duradero en el ámbito político colombiano.