Colombia - La protección de la reputación digital de una empresa es cada vez más urgente. Con el crecimiento del comercio online y el acceso a información valiosa en Internet, las amenazas cibernéticas como el phishing se han multiplicado. Las empresas, grandes y pequeñas, enfrentan un riesgo constante: los ciberdelincuentes están al acecho, y la falta de medidas preventivas puede resultar en pérdidas significativas. En este contexto, la estrategia de SEO defensivo ha cobrado relevancia como una herramienta clave para proteger los activos digitales de las marcas.
En Colombia, el phishing ha alcanzado niveles alarmantes. Se trata de un delito que no discrimina sectores y afecta tanto a usuarios como a empresas. En particular, aquellas con alto tráfico orgánico y valiosos datos transaccionales se han vuelto objetivos primarios para los estafadores. “Este delito no discrimina sectores, pero aquellos con alto tráfico orgánico y datos transaccionales valiosos se han vuelto un blanco fácil”, explica Osvaldo Castellar, CEO de Digitraffic, una empresa especializada en soluciones digitales.
Las amenazas no solo provienen de los ciberdelincuentes, sino también de la falta de previsión de las empresas. Si bien las amenazas son cada vez más sofisticadas, la responsabilidad recae en gran medida en las empresas por no tomar las medidas adecuadas. "¿Quién tiene la culpa? ¿Los ciberdelincuentes o las empresas por su falta de previsión?", plantea Castellar. La respuesta parece clara: es momento de actuar para proteger la marca antes de que sea demasiado tarde.
La importancia del SEO defensivo
El SEO defensivo es una estrategia que va más allá del posicionamiento en los motores de búsqueda. Su objetivo es proteger la reputación, el tráfico y la seguridad de un sitio web frente a amenazas externas, como el phishing o la competencia desleal. “El SEO defensivo no solo se enfoca en mejorar el ranking, sino en blindar el ecosistema digital de una marca”, señala Castellar.
Entre las acciones que abarca el SEO defensivo, se encuentran la protección del tráfico orgánico y la prevención de ataques cibernéticos, entre otros. Una marca debe asegurarse de que los usuarios lleguen a sus plataformas legítimas y evitar que los estafadores se beneficien de su tráfico. Detectar y prevenir prácticas de SEO negativas es fundamental para mantener la integridad digital de la marca.
Un ejemplo claro de cómo el phishing puede afectar incluso a las marcas más establecidas en Colombia es el caso de Seguro Mundial, una reconocida empresa de seguros. Seguro Mundial, con más de 355.000 usuarios mensuales, fue víctima de un ataque cibernético que incluyó la compra de un dominio similar: soatmundial.com.co. Este dominio falso logró posicionarse por encima del sitio oficial en palabras clave de alto valor, como “comprar un soat”, que tiene un volumen de búsqueda mensual de 74.000 usuarios.
El tráfico generado por este dominio falso alcanzó las 272.000 visitas mensuales, superando al sitio legítimo en términos de visibilidad. Este tipo de ataques no solo afecta a la reputación de la marca, sino que también pone en riesgo la seguridad de los usuarios. Castellar enfatiza que este tipo de incidentes resalta la necesidad urgente de contar con una estrategia sólida de SEO defensivo: “Es un golpe maestro para los estafadores, pero un desastre para los usuarios y la empresa”.
Las consecuencias del phishing no se limitan a las pérdidas económicas directas. El daño a la reputación de una marca puede ser irreversible, afectando la confianza de los clientes y la lealtad hacia la empresa. En un mundo cada vez más digital, donde las interacciones y transacciones se realizan en línea, proteger la presencia digital de una marca es tan crucial como proteger sus activos físicos.
Las medidas preventivas son esenciales para evitar que estos ataques afecten a las empresas. Es necesario monitorear constantemente el tráfico web, registrar dominios estratégicos y optimizar la seguridad técnica del sitio. Además, el SEO defensivo debe ser parte de la estrategia integral de marketing digital de una marca, no solo como una táctica para posicionarse mejor en los motores de búsqueda, sino como una barrera de protección frente a los ataques cibernéticos.
Las empresas deben estar alertas y preparadas. No basta con esperar a ser víctimas de un ataque. “El phishing no espera, y tú tampoco deberías”, concluye Osvaldo Castellar. En un entorno tan vulnerable, la preparación y la anticipación son las mejores armas contra el daño digital.