Colombia - Un nuevo episodio se ha desatado en el complejo entramado político colombiano, protagonizado por el exjefe paramilitar Salvatore Mancuso y el expresidente Álvaro Uribe. Desde su reclusión en la cárcel La Picota, Mancuso ha respondido con una extensa carta fechada el 12 de marzo a las recientes declaraciones de Uribe, desmintiendo acusaciones y aclarando su postura ante las crecientes tensiones.
En este documento, Mancuso desestima categóricamente las alegaciones de Uribe sobre su supuesta implicación en procesos judiciales destinados a perjudicarlo. También rechaza haber contactado a terceros para manipular versiones o testimonios en su contra, subrayando que su regreso al país no tiene la intención de conspirar contra el exmandatario ni sus aliados políticos.
La carta, que marca un nuevo episodio en una relación históricamente tensa, revela los planes de Mancuso de emprender acciones legales contra Uribe. El exparamilitar anuncia su intención de demandar penalmente al expresidente por lo que considera "infundios" en sus declaraciones públicas. Además, lo invita a comparecer ante un nuevo tribunal de cierre, ofreciendo una oportunidad para que ambos cuenten sus verdades.
"Sr. expresidente Uribe, nunca he llamado a nadie para orientar versiones ni testimonios", enfatiza Mancuso en su carta. "De hecho, no soy yo quien está involucrado en procesos judiciales por ese motivo, no soy yo el que tiene esas prácticas de enviar a terceros a inducir falsos testimonios. La opinión pública sabe quién, entre usted y yo, recurre a esas turbias prácticas", añade. [sic]
Mancuso insiste en que su retorno al país no está relacionado con organizar un complot contra Uribe ni busca su judicialización. Sin embargo, ante las acusaciones de buscar falsos testigos, anuncia que sí lo demandará. "Esta misma semana presentaré, sobre la base de sus afirmaciones, denuncia penal en su contra para que se aclare o conozcan los motivos por los cuales usted hace esa clase de afirmaciones, para que proceda a hacer llegar a las autoridades competentes las supuestas pruebas de sus infundios", escribe.
Este nuevo capítulo legal propuesto por Mancuso incluye tanto la demanda anunciada como la sugerencia de establecer un tribunal de cierre, una alternativa a los tribunales de Justicia y Paz y la Jurisdicción Especial para la Paz. "Su nombre y el mío están en esa página que las y los colombianos quieren pasar, lo invito a que la pasemos a partir de un tribunal de cierre en el cual es preciso que usted y yo comparezcamos", señala en su carta.
La propuesta de Mancuso no solo busca resolver su disputa con Uribe, sino también abordar las implicaciones del conflicto armado colombiano de manera más amplia. Esta iniciativa coincide con propuestas similares presentadas por excomandantes de las FARC, lo que podría representar un nuevo enfoque en la búsqueda de la verdad y la reconciliación en el país.
