Madrid - España ha exigido una disculpa pública al presidente argentino Javier Milei, luego de que este calificara de "corrupta" a Begoña Gómez, esposa del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, durante una visita oficial a Madrid. Este incidente ha desencadenado una disputa diplomática significativa entre ambos países.
José Manuel Albares, ministro de Asuntos Exteriores de España, calificó los comentarios de Milei como "un ataque frontal a nuestra democracia, a nuestras instituciones y a España". Albares también señaló que el gobierno español "tomaría todas las medidas que considerara apropiadas para defender nuestra soberanía" si Milei no se disculpaba. Además, España llamó a consultas a su embajador en Buenos Aires, subrayando la seriedad de la situación.
Durante su estancia en Madrid, Milei presentó su libro "El camino del libertario" en la sede de LA RAZÓN, evento al que asistieron personalidades de la política, la economía y la cultura. Asimismo, se reunió con directivos de empresas españolas y con el diputado y presidente de Vox, Santiago Abascal. Sin embargo, Milei no se reunió con Sánchez ni con el rey Felipe VI.
En un mitin de extrema derecha organizado por Vox, Milei criticó duramente al socialismo y atacó a Sánchez y a su esposa. "Tiene una esposa corrupta, se ensucia y tarda cinco días en pensar qué hacer" [sic], dijo Milei, refiriéndose a una pausa que Sánchez tomó el mes pasado para considerar si continuaría como primer ministro tras una denuncia contra Gómez por presunto tráfico de influencias. Esta denuncia, presentada por un grupo vinculado a la extrema derecha, está siendo investigada preliminarmente por un juez, aunque Sánchez ha calificado las acusaciones como "inexistentes" y Gómez no ha comentado al respecto.
La respuesta de España fue inmediata y contundente. Albares afirmó que si Milei no se disculpaba, se tomarían todas las medidas necesarias para defender la dignidad y soberanía españolas. La decisión de llamar a consultas a su embajador en Buenos Aires refuerza esta postura, dejando al encargado de negocios al frente de la embajada.
En su cuenta de X (anteriormente Twitter), Pedro Sánchez enfatizó la importancia del respeto mutuo entre naciones. "España y Argentina son dos países hermanos cuyos pueblos se quieren y se respetan. Entre gobiernos los afectos son libres, pero el respeto es irrenunciable", afirmó. "Quien ayer habló no lo hizo en nombre del gran pueblo argentino. Defender a las instituciones españolas de los insultos y difamaciones de mandatarios extranjeros no entiende de peros. Más allá de la ideología, está la educación y el patriotismo" [sic].
Josep Borrell, alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, y exministro de Asuntos Exteriores de España, también condenó las declaraciones de Milei. "Los ataques contra familiares de líderes políticos no tienen cabida en nuestra cultura: los condenamos y rechazamos, especialmente cuando provienen de socios" [sic], manifestó Borrell.
Durante la manifestación de Vox, Milei pronunció un discurso enérgico en defensa del capitalismo de libre mercado y criticó el intervencionismo estatal y el socialismo. "Esta idea parasitaria de Occidente debe ser destruida. Esta idea de que los políticos tienen que cuidar al ciudadano desde la cuna hasta la tumba", declaró Milei. "La justicia social es siempre injusta" [sic].
El presidente argentino ha priorizado las reuniones con figuras de la derecha política, como se evidenció en su encuentro con Jair Bolsonaro antes de asumir la presidencia y su participación en la Conferencia de Acción Política Conservadora en Estados Unidos, donde se reunió con el expresidente Donald Trump. Este patrón ha generado tensiones con líderes de izquierda, incluyendo al presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, con quien aún no se ha reunido.
Este reciente incidente marca otro punto de tensión en la relación entre Milei y el gobierno de Sánchez. Anteriormente, el ministro español de Transportes, Óscar Puente, sugirió que Milei había consumido sustancias durante una aparición televisiva, lo que provocó una respuesta airada del presidente argentino, quien criticó las políticas de Sánchez y las calificó de "pobreza y muerte".
España es el segundo mayor inversionista extranjero en Argentina después de Estados Unidos, lo que subraya la importancia de mantener relaciones diplomáticas estables entre ambos países. La disputa actual, sin embargo, pone en riesgo estos lazos y añade incertidumbre al futuro de las relaciones bilaterales.