La invitación a “Tinto” del presidente Petro, a la oposición liderada por el expresidente Álvaro Uribe, para dialogar sobre la reforma a la salud, no fue lo que esperaba el Gobierno nacional .
La reunión, que contó con representantes de médicos y pacientes, presenció la petición de estos últimos al presidente Petro para retirar la reforma y buscar consensos a través de mesas de trabajo en todo el país.
Uribe, por su parte, presentó una ponencia argumentando que no se necesita un proyecto de ley para modificar la reforma a la salud. El ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, también intervino, aunque su participación se vio afectada por una leve hemorragia nasal, generando inquietud entre los presentes.
La armonía de la reunión se vio alterada cuando Félix León Hernández, director de la Adres, acusó a Uribe de perjuicios en la Unidad de Pago por Capitación (UPC) durante su presidencia. La tensión se disparó rápidamente, culminando en la abrupta terminación del encuentro. Uribe respondió de manera contundente, negando su responsabilidad en los mencionados perjuicios.
En palabras del exmandatario, la reunión no fue un diálogo, sino un "debate franco y claro". Detalló los reparos expresados a Petro sobre la reforma, indicando que las deficiencias no se deben al sistema, sino a la falta de infraestructura o a su mal manejo.
Las diferencias entre Petro y Uribe sobre las líneas rojas de la reforma a la salud no permitieron llegar a un acuerdo. El Centro Democrático solicitó retirarla, pero el Gobierno se mantuvo firme en su posición de no hacerlo.
Carlos Meisel, senador del Centro Democrático, uno de los voceros de la colectividad, reveló que, después de más de tres horas de debate, se solicitó al Gobierno retirar la reforma, obteniendo una respuesta tajante: no.
Vea Declaraciones del Senador Carlos Meisel: