Colombia - La Registraduría Nacional del Estado Civil investiga 134 cédulas de ciudadanía que habrían sido expedidas utilizando registros civiles que no contaban con un número de identificación asignado, tal como lo exige la normatividad vigente. La detección de estas irregularidades es producto de un análisis realizado por el Grupo de Analítica de Datos e Inteligencia Artificial (GADIA) y la Dirección Nacional de Registro Civil, quienes pusieron en marcha un modelo tecnológico diseñado para examinar inconsistencias en los procesos de identificación ciudadana.
El hallazgo se enmarca en una estrategia de vigilancia permanente que genera alertas semanales, permitiendo a la entidad realizar seguimientos constantes a posibles anomalías. Las 134 cédulas en cuestión fueron emitidas con base en registros civiles de nacimiento inscritos entre 1980 y 1999, a los que no se les había asignado un número de identificación oficial al momento de su inscripción.
La Registraduría anunció que estos casos serán puestos en conocimiento de la Fiscalía General de la Nación y de Migración Colombia para que se adelanten las investigaciones correspondientes. La entidad busca establecer si estas expediciones irregulares corresponden a episodios de suplantación de identidad o a posibles fraudes en la tramitación de documentos oficiales.
Además del grupo de cédulas identificadas, el modelo también generó una alerta sobre 1.630 registros civiles de nacimiento que, pese a haber sido inscritos en el mismo periodo, no han sido utilizados para expedir tarjetas de identidad ni cédulas. Esta situación podría deberse a errores administrativos, omisiones familiares o la intención de utilizar esos registros de manera fraudulenta.
El sistema tecnológico aplicado por la Registraduría permite realizar cruces de datos que generan advertencias automáticas, facilitando la depuración del censo electoral y contribuyendo a prevenir delitos asociados a la suplantación. Este modelo será aplicado de forma continua, con monitoreos semanales que se articularán con las registradurías municipales y departamentales en todo el país.
"Estas alertas permiten anticipar posibles usos irregulares de la identificación civil y fortalecen el control institucional en todos los niveles territoriales", señaló un vocero del GADIA. La entidad también recalcó que la colaboración con los organismos de investigación penal y migratoria es clave para garantizar que los documentos de identidad sean confiables y reflejen fielmente la realidad demográfica del país.
El procedimiento que sigue la Registraduría incluye no solo el reporte a las autoridades judiciales y migratorias, sino también la revisión de los sistemas internos de expedición de documentos, con el objetivo de detectar patrones, corregir fallos y evitar que estas situaciones se repitan. La entidad reafirmó su compromiso con la legalidad y la transparencia en la administración de la identidad ciudadana.