Barranquilla D.E.I.P. - Si pensabas que el carnaval de Barranquilla solo era alegría, tradición y folclor, este año las cosas se han puesto más candentes que nunca. Y es que desde que se escogieron las reinas del Carnaval S.A.S y del Carnaval de la 44, no ha pasado un solo día sin que las redes sociales estén encendidas con rumores, indirectas y teorías de conspiración. ¿Qué está pasando detrás del Carnaval 2025?
Por un lado, está Tatiana, la Reina del Carnaval S.A.S, que ha optado por un enfoque tradicional, destacando la historia, los hacedores y el legado cultural que hacen del Carnaval de Barranquilla un Patrimonio de la Humanidad. Su perfil bajo en cuanto a protagonismo personal ha sido notable, centrándose en promover el trabajo de su equipo y las raíces del carnaval. Sin embargo, este enfoque ha sido interpretado por algunos como "falta de brillo", sobre todo si se compara con la Reina del Carnaval de la 44, Alexandra Estarita, cuya historia personal ya venía cargada de aspiraciones y controversia.
Se sabía que quien contendiera con Alexandra iba a ser motivo de comparaciones. Fuentes internas confirman que durante la elección de la reina de carnaval 2023 bajo la modalidad implementada por el entonces alcalde Jaime Pumarejo, Alexandra siempre fue competitiva y buscaba sobresalir sobre las demás. Incluso, se pudo observar en el festival del perro de la edición 2023 que, en un evento de Olímpica Stereo, ella se presentó en tarima como la Reina del carnaval 2024 y tiempo después fue escogida Melissa Cure.
Alexandra soñó durante años con ser la Reina Central del Carnaval, pero nunca logró cumplir ese anhelo. Aunque finalmente aceptó ser la Reina del Carnaval de la 44, internautas comentan que lo hizo con cierta frustración y resentimiento. Desde el primer momento, Alexandra ha trabajado para destacarse no solo como reina, sino como una figura que opaca a la reina central.
El último capítulo de este supuesto enfrentamiento se escribió en la Gran Parada de Luz, donde Alexandra no pudo desfilar en su carroza debido a que, según los organizadores (la Fundación Pan y Panela), no cumplió con ciertos lineamientos y políticas. Sin embargo, los rumores no tardaron en señalar a Carnaval S.A.S y a Tatiana como responsables indirectos de esta decisión, bajo la sospecha de querer opacar a la reina del Carnaval de la 44.
La polémica escaló aún más cuando Andrea Valdiri, amiga de la doctora Anita Vergara (suegra de Alexandra), salió en defensa de ella. En un post de Instagram, aseguró que lo mismo le pasó en 2020 cuando no pudo desfilar durante el reinado de Isabella Chams, y sugirió que había "intervenciones" para evitar que alguien brillara más que la reina central. Sin embargo, fuentes oficiales aseguran que tanto en 2020 como en 2025, estas decisiones se debieron a incumplimientos de lineamientos por parte de las involucradas.
Por su parte, Tatiana Angulo, Reina del Carnaval de Barranquilla, ha optado por mantenerse al margen de la controversia, enfocándose en promocionar los eventos centrales del Carnaval y dejando que los hechos hablen por sí solos.
La controversia aumentó cuando la reina del Carnaval de la 44 recibió una condecoración por la Cámara de Representantes. Aunque algunos usuarios afirman en redes sociales que esta distinción fue comprada, el medio no ha podido confirmar esta información.
Lo que parece estar claro en medio de todo este revuelo es que el enfrentamiento no solo tiene que ver con las reinas, sino también con los equipos de marketing detrás de ellas. Del lado de Carnaval S.A.S, la estrategia ha sido institucional y cultural, mientras que en el Carnaval de la 44 el enfoque parece estar más centrado en Alexandra como Reina. Esto ha dado pie a una batalla silenciosa entre las organizaciones que, lejos de fortalecer la tradición, parece dividir a los barranquilleros.
Incluso influenciadores locales han avivado el fuego, creando teorías y generando debates en redes que solo han alimentado más la polémica. Así también, se ha podido evidenciar que medios digitales que tradicionalmente se han dedicado a compartir e informar de los eventos de carnaval central, han tomado un lado en esta controversia generando así mayor confrontación en el público.
Mientras tanto, las redes sociales no perdonan. Ahora, muchos barranquilleros aseguran que prefieren asistir a los eventos del Carnaval de la 44, sintiendo que hay un mayor protagonismo de su reina, mientras que otros se mantienen leales a la Vía 40 y a la tradición central.
En medio de todo este espectáculo, queda una pregunta importante: ¿estamos perdiendo de vista el verdadero propósito del Carnaval? Mientras las instituciones y equipos de marketing se enfrentan por el protagonismo, los hacedores, músicos, bailarines y demás actores clave parecen quedar en segundo plano.
¿Será que el Carnaval necesita menos egos y más unidad? Al final, ¿no se trata de celebrar juntos la riqueza cultural y folclórica de Barranquilla?
La pelota está en la cancha de los organizadores. ¿Lograrán llegar a un acuerdo, o continuará esta "guerra de reinas" dominando los titulares de los próximos carnavales? ¡Solo el tiempo lo dirá!
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