Barranquilla D.E.I.P - Un caso de hurto de energía fue detectado en la Clínica Santa Mónica, ubicada en la carrera 44 N. 70-135, en el norte de Barranquilla. Técnicos especializados de la empresa Air-e descubrieron manipulaciones en los cables de alimentación de los transformadores de corriente, lo que permitió a la clínica evadir el pago del consumo real de electricidad.
Durante una inspección técnica, se encontraron señales de corriente perforadas y "puenteadas", impidiendo que el medidor registrara correctamente el consumo. Según estimaciones, la energía no facturada mensualmente asciende a 32 millones de pesos, lo que equivale a aproximadamente el 50% del consumo real de la clínica. Este hallazgo expone un problema significativo en el manejo de recursos energéticos en el establecimiento, que cuenta con numerosos equipos eléctricos esenciales para la atención de pacientes.
Otros casos de conexiones irregulares
Este no es un caso aislado. En otros sectores de Barranquilla, técnicos de Air-e descubrieron conexiones eléctricas irregulares en varios restaurantes. Uno de ellos es el Restaurante Lamar Pescados y Mariscos, en la carrera 60 con calle 68, donde se encontró un equipo de medida manipulado. La pérdida económica estimada para este establecimiento es de más de 5 millones de pesos mensuales debido a la evasión del pago real de la contribución.
Otro incidente se registró en el restaurante 'Las Rocas del Mar', en la carrera 56 con calle 68. Aquí, el personal técnico halló un medidor electrónico perforado que permitía evadir el consumo real de energía. Esta manipulación resultó en un consumo no facturado de 6233 KWh al mes, valorado en 9 millones 800 mil pesos.
El gerente de Servicios Jurídicos de Air-e, Fermín de la Hoz, afirmó que la empresa continuará con las acciones para combatir el robo de energía. "De la mano con las autoridades estamos ejecutando las acciones respectivas frente al delito de Defraudación de Fluidos. Confiamos de manera paralela que sigan avanzando los procesos penales sobre este particular y se aplique todo el peso de la ley a los que roban energía", declaró De la Hoz.
La problemática del robo de energía no se limita a Barranquilla. En municipios y zonas rurales de Atlántico, Magdalena y La Guajira, Air-e ha identificado múltiples casos de manipulación de redes y equipos de medida. Estas actividades ilícitas representan una amenaza tanto para la empresa como para la calidad y estabilidad del suministro eléctrico en estas regiones.
Las autoridades locales y Air-e están trabajando conjuntamente para enfrentar esta situación y asegurar que se tomen las medidas legales contra los responsables. El robo de energía no solo genera pérdidas económicas significativas para la compañía, sino que también afecta negativamente a los usuarios que pagan por el servicio.
En el caso de la Clínica Santa Mónica, las autoridades y Air-e están evaluando las sanciones pertinentes y los pasos necesarios para regularizar el suministro eléctrico del establecimiento. Mientras tanto, la clínica enfrenta posibles repercusiones legales y económicas por estas irregularidades.
