Soledad, Atlántico - Cada vez son más los detalles que se conocen en torno a la emergencia registrada en el puente de la calle 30, a la altura del colegio Inem, en la vía Barranquilla-Soledad, que dejó cuatro personas muertas y tres heridas. Desde el pasado 12 de marzo de 2024 se había solicitado “intervención urgente” en las orejas del puente debido a su “estado muy deteriorado”.
Redprensa tuvo acceso exclusivo a esta información a través de una carta enviada directamente a la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) por Bernardo Pardo, jefe de la Oficina Jurídica de la Alcaldía de Soledad. En la misiva, Pardo también advirtió sobre las afectaciones a la movilidad que ya estaba generando el deterioro de la estructura.
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En una entrevista realizada a la alcaldesa de Soledad, Alcira Sandoval, ella confirmó que la Alcaldía había advertido a la ANI acerca del deterioro del puente. En declaraciones a los medios, informó sobre un documento donde se alertaba del deterioro de las orejas del puente y su recorrido. La alcaldesa también señaló que la ANI no respondió a la solicitud hecha por la Alcaldía. Recalcó que no es solo el puente sino toda la vía al aeropuerto la que está muy deteriorada, con huecos y baches. Según Sandoval, la ANI no ha hecho ningún tipo de mantenimiento a la estructura del puente.
La carta enviada por el jefe de la Oficina Jurídica de la Alcaldía de Soledad, Bernardo Pardo Ramos, proporciona detalles fundamentales sobre la situación. En ella, Pardo explica que la vía Calamar - Barranquilla, Ruta 2516, es una vía nacional concesionada a la ANI. Esta carretera, que se extiende por 80.753 kilómetros desde Suan hasta el Puente Simón Bolívar en Barranquilla, ha sido objeto de varios contratos de concesión que incluyen su mantenimiento.
En particular, Pardo resalta que el tramo conocido como “Orejas del Puente Simón Bolívar (Calle 30)” está en un estado muy deteriorado, generando incomodidad y peligros para la comunidad y los conductores. Este tramo específico fue entregado a la ANI en varios contratos de concesión a lo largo de los años, el último de ellos en 2015. Sin embargo, la falta de mantenimiento ha llevado a su deterioro progresivo.
La solicitud de intervención urgente realizada en la carta se fundamenta en estos antecedentes, enfatizando la necesidad de que la ANI actúe de inmediato para evitar mayores riesgos y mejorar la seguridad y comodidad de los usuarios de esta vía.
Esta situación pone en evidencia la grave negligencia en el mantenimiento de infraestructuras críticas y subraya la urgencia de medidas correctivas por parte de las autoridades competentes para prevenir futuras tragedias.
