Barranquilla D.E.I.P. - El Juzgado 12 Penal del Circuito de Barranquilla emitió un fallo absolutorio en favor de Dayana Jael Jassir De la Hoz, quien había sido acusada por la Fiscalía como presunta autora intelectual del asesinato de su esposo, Eduardo Pinto Viloria, exdirector regional de Medicina Legal. El crimen, ocurrido el 4 de mayo de 2016 en Barranquilla, había mantenido un alto perfil mediático desde su ejecución.
Este viernes, durante una audiencia, la jueza que revisó el caso señaló que no existieron pruebas suficientes para vincular a Jassir con el asesinato. Aunque la decisión es de primera instancia, la Fiscalía podrá apelar el fallo si considera que hay elementos para reconsiderarlo.
A pesar de la absolución de Dayana Jassir, el caso del homicidio de Eduardo Pinto continúa activo, pues los responsables materiales del asesinato ya fueron sentenciados. Johan Beltrán Ulloque, Jesús Gutiérrez Arrieta, Miguel Ángel González y Alberto Mario Cabrera Barrios, alias ‘Ñeco’, fueron condenados a 19 años de prisión por su participación directa en la ejecución del homicidio.
Los acusados aceptaron los cargos relacionados con el crimen, que inicialmente fue presentado como un robo. Sin embargo, la investigación posterior evidenció que el asesinato fue premeditado y orquestado por personas cercanas al entorno de Pinto. La decisión judicial contra los responsables materiales del asesinato confirmó que el hecho fue un acto violento y no un simple atraco como inicialmente se había planteado.
Eduardo Pinto Viloria, exfuncionario de Medicina Legal, fue asesinado en su hogar en el barrio Cevillar, Barranquilla, el 4 de mayo de 2016. Según el informe de las autoridades, ese día, Dayana Jassir De la Hoz salió de su casa cuando fue interceptada por tres hombres que la obligaron a regresar a la vivienda.
Al entrar, los hombres, en compañía de Jassir, comenzaron a buscar una suma de dinero. Mientras ella fue amarrada en el primer piso de la casa, Pinto fue llevado al segundo piso, donde fue ejecutado a quemarropa. En un primer momento, las investigaciones indicaron que se trataba de un robo, pero pronto se descubrió que el crimen tenía características de ser un plan previamente preparado.
El fallo absolutorio en favor de Dayana Jassir ha generado gran interés en la comunidad barranquillera. La decisión judicial deja abierta la posibilidad de apelación por parte de la Fiscalía, que aún tiene la opción de presentar nuevos elementos de prueba que puedan modificar la resolución. El caso podría ser revisado en instancias superiores si surgen pruebas adicionales que impliquen a Jassir de forma más clara en el crimen.
Este caso ha atraído atención debido a la figura de Dayana Jassir, acusada de ser la autora intelectual del asesinato de su esposo, y sigue siendo un tema central en los medios de comunicación de Barranquilla. La decisión judicial está lejos de ser definitiva y podría cambiar en función de los próximos pasos legales.
El asesinato de Eduardo Pinto dejó una marca en su familia y en la opinión pública de Barranquilla. A pesar de que se han dado avances en el esclarecimiento de los hechos, las interrogantes sobre las motivaciones detrás del crimen y la implicación de su esposa siguen siendo puntos de discusión. Este caso ha mantenido la atención pública, y a medida que se desarrollan las etapas judiciales, la comunidad sigue observando de cerca los procedimientos.
Aunque los responsables materiales ya han sido condenados, las dudas sobre el papel de Jassir siguen generando debate. La sociedad barranquillera permanece atenta a cualquier novedad en el proceso judicial, en espera de que se haga justicia completamente.
El caso de Eduardo Pinto es uno de los más relevantes en la historia judicial reciente de Barranquilla. La resolución de este proceso no solo ha afectado a las personas directamente involucradas, sino que también ha tenido un fuerte impacto en la percepción de la seguridad en la ciudad. La sociedad barranquillera está expectante de cómo se resolverá este caso en los próximos meses, con la posibilidad de que nuevas pruebas surjan o el fallo sea apelado.
Barranquilla D.E.I.P. - El Juzgado 12 Penal del Circuito de Barranquilla emitió un fallo absolutorio en favor de Dayana Jael Jassir De la Hoz, quien había sido acusada por la Fiscalía como presunta autora intelectual del asesinato de su esposo, Eduardo Pinto Viloria, exdirector regional de Medicina Legal. El crimen, ocurrido el 4 de mayo de 2016 en Barranquilla, había mantenido un alto perfil mediático desde su ejecución.
Este viernes, durante una audiencia, la jueza que revisó el caso señaló que no existieron pruebas suficientes para vincular a Jassir con el asesinato. Aunque la decisión es de primera instancia, la Fiscalía podrá apelar el fallo si considera que hay elementos para reconsiderarlo.
A pesar de la absolución de Dayana Jassir, el caso del homicidio de Eduardo Pinto continúa activo, pues los responsables materiales del asesinato ya fueron sentenciados. Johan Beltrán Ulloque, Jesús Gutiérrez Arrieta, Miguel Ángel González y Alberto Mario Cabrera Barrios, alias ‘Ñeco’, fueron condenados a 19 años de prisión por su participación directa en la ejecución del homicidio.
Los acusados aceptaron los cargos relacionados con el crimen, que inicialmente fue presentado como un robo. Sin embargo, la investigación posterior evidenció que el asesinato fue premeditado y orquestado por personas cercanas al entorno de Pinto. La decisión judicial contra los responsables materiales del asesinato confirmó que el hecho fue un acto violento y no un simple atraco como inicialmente se había planteado.
Eduardo Pinto Viloria, exfuncionario de Medicina Legal, fue asesinado en su hogar en el barrio Cevillar, Barranquilla, el 4 de mayo de 2016. Según el informe de las autoridades, ese día, Dayana Jassir De la Hoz salió de su casa cuando fue interceptada por tres hombres que la obligaron a regresar a la vivienda.
Al entrar, los hombres, en compañía de Jassir, comenzaron a buscar una suma de dinero. Mientras ella fue amarrada en el primer piso de la casa, Pinto fue llevado al segundo piso, donde fue ejecutado a quemarropa. En un primer momento, las investigaciones indicaron que se trataba de un robo, pero pronto se descubrió que el crimen tenía características de ser un plan previamente preparado.
El fallo absolutorio en favor de Dayana Jassir ha generado gran interés en la comunidad barranquillera. La decisión judicial deja abierta la posibilidad de apelación por parte de la Fiscalía, que aún tiene la opción de presentar nuevos elementos de prueba que puedan modificar la resolución. El caso podría ser revisado en instancias superiores si surgen pruebas adicionales que impliquen a Jassir de forma más clara en el crimen.
Este caso ha atraído atención debido a la figura de Dayana Jassir, acusada de ser la autora intelectual del asesinato de su esposo, y sigue siendo un tema central en los medios de comunicación de Barranquilla. La decisión judicial está lejos de ser definitiva y podría cambiar en función de los próximos pasos legales.
El asesinato de Eduardo Pinto dejó una marca en su familia y en la opinión pública de Barranquilla. A pesar de que se han dado avances en el esclarecimiento de los hechos, las interrogantes sobre las motivaciones detrás del crimen y la implicación de su esposa siguen siendo puntos de discusión. Este caso ha mantenido la atención pública, y a medida que se desarrollan las etapas judiciales, la comunidad sigue observando de cerca los procedimientos.
Aunque los responsables materiales ya han sido condenados, las dudas sobre el papel de Jassir siguen generando debate. La sociedad barranquillera permanece atenta a cualquier novedad en el proceso judicial, en espera de que se haga justicia completamente.
El caso de Eduardo Pinto es uno de los más relevantes en la historia judicial reciente de Barranquilla. La resolución de este proceso no solo ha afectado a las personas directamente involucradas, sino que también ha tenido un fuerte impacto en la percepción de la seguridad en la ciudad. La sociedad barranquillera está expectante de cómo se resolverá este caso en los próximos meses, con la posibilidad de que nuevas pruebas surjan o el fallo sea apelado.