Colombia - El sector camionero colombiano se encuentra en un momento crítico tras el reciente anuncio del Gobierno sobre el aumento del precio del ACPM (combustible diésel). Los transportadores han expresado su preocupación y han advertido que dejarán de operar si no se ajusta la fórmula de cálculo del precio del combustible diésel, lo que podría afectar la cadena de suministro en el país.
Alfonso Medrano, presidente de la Asociación Colombiana de Camioneros (ACC), indicó que el aumento en el precio del ACPM, anunciado por el Ministerio de Hacienda, pone en riesgo la viabilidad económica del gremio. Según Medrano, el costo del combustible diésel ha alcanzado un punto insostenible, amenazando con afectar la rentabilidad de las operaciones de transporte de carga en todo el país.
Durante meses, la ACC participó en mesas técnicas con representantes de los ministerios de Hacienda, Transporte y Minas, buscando una solución que permitiera ajustar la fórmula del precio del ACPM. Según Medrano, el gremio contrató expertos para desarrollar una nueva metodología de cálculo del precio del diésel, pero pese a estos esfuerzos, el gobierno decidió mantener el aumento sin implementar los ajustes propuestos.
"Nosotros cumplimos con la tarea, pero el ministro de Hacienda no cumplió con su parte", afirmó Medrano, quien subrayó que el diálogo sostenido durante estos meses no se tradujo en acciones concretas por parte del gobierno. La falta de respuesta ha llevado a los camioneros a considerar la posibilidad de dejar de operar sus vehículos si no se ajustan los costos del combustible diésel en la estructura de precios.
El cese de actividades del gremio camionero podría tener implicaciones significativas para la economía colombiana, dado que el transporte de carga es esencial para la distribución de bienes en el país. Cualquier interrupción en este sector podría afectar la disponibilidad de productos en diferentes regiones, con el consecuente impacto en los precios al consumidor.
Medrano también destacó que las ayudas y subsidios otorgados por el gobierno a algunos transportadores son limitados y no alcanzan a la mayoría del gremio. "Es solo una minoría la que recibe subsidios", puntualizó, añadiendo que la mayoría de los transportadores independientes se enfrenta en solitario al aumento en el costo del combustible diésel.
El sector camionero ha sido históricamente uno de los pilares de la economía colombiana, responsable del transporte de la mayoría de bienes y productos que circulan en el país. La posibilidad de un cese de actividades a nivel nacional plantea un desafío significativo para la cadena de suministro y el mercado interno.
El gobierno aún no ha respondido a las últimas declaraciones de la ACC, pero se espera que en los próximos días se pronuncie sobre las posibles acciones a tomar para mitigar el impacto del aumento en el precio del diésel. Mientras tanto, el sector empresarial y los consumidores siguen con atención la evolución de esta situación, que podría generar nuevas dificultades en la economía del país.
Los camioneros han dejado claro que, si no se encuentra una solución viable, están preparados para tomar medidas que podrían interrumpir el transporte de carga a nivel nacional. Esta situación pone en riesgo la estabilidad de la cadena de suministro y podría tener un impacto significativo en la economía colombiana.
