Colombia - Salvatore Mancuso, exjefe de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), está a punto de recuperar su libertad en las próximas horas, este sábado. La Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Bogotá revocó el pasado jueves 57 medidas de aseguramiento que pesaban sobre él, lo que allana su salida de la cárcel La Picota. Se espera que se radique en Medellín. Nelson Menjura, abogado de Mancuso, ha informado que el trámite administrativo para verificar las medidas de aseguramiento en el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) se llevará a cabo posiblemente este sábado.
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Además, Menjura ha confirmado que se ha establecido un esquema de seguridad para el traslado de Mancuso, quien no podrá portar armas ni salir del país. La justicia también le ha ordenado mantenerse alejado de las regiones del Caribe colombiano, donde ejerció mayor influencia criminal.
La Jurisdicción Especial de Paz (JEP) ha reclamado competencia para llevar a cabo los procesos relacionados con Mancuso, considerándolo un agente bisagra entre organismos del Estado y los grupos paramilitares durante el conflicto armado. Sin embargo, la decisión final sobre este asunto está en manos de la Corte Constitucional.
Mientras se espera el veredicto del tribunal constitucional, el proceso de Justicia y Paz continúa siendo la instancia encargada del exparamilitar, quien regresó a Colombia en febrero después de cumplir una condena de 16 años en Estados Unidos por narcotráfico.
El presidente Gustavo Petro ha expresado su apoyo a la libertad de Mancuso, incluso lo ha nombrado gestor de paz y lo ha invitado a la Casa de Nariño. "Si se puede, voy a invitar a Mancuso a mi oficina. Van a caer truenos y centellas. Le voy a proponer cerrar esa historia de la 'cacería' contra humildes campesinos, él tiene una historia", aseguró Petro en marzo desde Montería, una de las regiones más afectadas por las acciones del exparamilitar.
El mandatario confía en que el conocimiento y experiencia criminal de Mancuso puedan contribuir a su política de paz total para lograr el desarme de estructuras que han adoptado prácticas similares a las de los paramilitares. Mientras tanto, las víctimas del conflicto esperan verdad, justicia y reparación.
