Barranquilla, Atlántico, Colombia - D.E.I.P - La defensa de Nicolás Petro, hijo del presidente Gustavo Petro, ha anunciado su decisión de recurrir a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en medio de un conflicto legal en el que alegan falta de garantías procesales y filtraciones por parte de la Fiscalía General de la Nación.
Desde el bufete de abogados de Nicolás Petro, el penalista Diego Henao Vargas ha expresado su preocupación en relación con la evidencia crucial que no fue entregada a la defensa. En sus palabras, "El video nunca fue entregado a la defensa, por parte de la Fiscalía General de la Nación, esto demuestra que el ente acusador no tiene la capacidad para garantizar la reserva de sus propios elementos, o los está filtrando de manera deliberada".
Además, Diego Henao Vargas ha detallado que la Fiscalía parece reacios o incapaces de brindar las "mínimas garantías procesales y el respeto por los Derechos Humanos a Nicolás Petro".
Ante las filtraciones de las declaraciones de Nicolás Petro, la defensa ha denunciado lo que consideran una "medida desesperada" de la Fiscalía y ha cuestionado la existencia de pruebas sólidas en su contra. Stewing Arteaga, uno de los abogados de Petro, ha afirmado que las conversaciones sobre una posible colaboración nunca se convalidaron y, por lo tanto, carecen de validez en el proceso penal.
El bufete de abogados también ha cuestionado la práctica de la Fiscalía de utilizar la detención preventiva como un método de investigación e instrumento para obtener delaciones, confesiones y preacuerdos con los procesados. Según ellos, esto ya se ha convertido en una práctica sistemática.
Como respuesta a esta situación, los abogados de Nicolás Petro han confirmado que llevarán el caso ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Su principal reclamo es que se garantice la lealtad e igualdad en el uso de las herramientas legales por parte de la Fiscalía.
En el documento emitido por el bufete, también se hace mención a lo que consideran "formas modernas de tortura" en el proceso jurídico contra Nicolás Petro. Estas incluyen la exposición mediática, custodias, capturas y otros mecanismos de presión física y psicológica que, según afirman, han forzado a su cliente a negociar con su libertad e incluso a aceptar cargos que no ha cometido.
El abogado penalista Alait Freja, defensor de Day Vásquez, otro implicado en el caso, ha declarado que los procesos de negociación son individuales y que las revelaciones de los interrogatorios no afectan su caso, ya que tienen radicados diferentes.
