Barranquilla, D.E.I.P. - El inicio de la Serie Profesional de Béisbol Colombiano estaba muy esperado, pero las condiciones climáticas obligaron a la suspensión del partido inaugural. Programado para disputarse en el estadio Édgar Rentería, el juego que enfrentaría a los Caimanes de Barranquilla y Leones de Barranquilla fue interrumpido debido al mal estado del campo de juego. La suspensión se produjo en la parte alta de la tercera entrada, con los Leones liderando el marcador 4-0.
Las lluvias que comenzaron a las 3 de la mañana de ese día dejaron el terreno en condiciones inapropiadas para el juego. A pesar de los esfuerzos por parte de la administración del evento y los árbitros para evaluar la situación, no se logró restablecer la adecuación del campo. En el primer inning, los Leones tomaron ventaja rápidamente con un hit de Dipre, que fue anotado por el japonés Daike Abe. En el segundo episodio, Sammy Infante amplió la ventaja con un doble que llevó a Patiño y Abe a la caja registradora. Infante también impulsó la cuarta carrera con un imparable de Shalin Polanco, poniendo el marcador en 4-0.
Durante el partido, el mánager de los Caimanes, José Mosquera, hizo un llamado a los árbitros, solicitando que se detuviera el compromiso y se trabajara en la mejora del estado del campo de juego. Sin embargo, su pedido no se concretó. En la parte alta de la tercera entrada, Irwing Ortega, el tercera base de los Caimanes, se encontró en una situación comprometida que puso en riesgo su integridad física al intentar manejar un roletazo de la ofensiva de los Leones.
La decisión de cancelar el juego se tomó luego de varios intentos fallidos de acondicionar el campo, priorizando la seguridad de los jugadores. La liga enfatiza que su principal objetivo es asegurar que todos los encuentros se realicen en condiciones seguras y adecuadas. “La prioridad debe ser la seguridad de los peloteros”, afirmaron los organizadores.
Erasmo Pérez, gerente de los Leones de Barranquilla, compartió su opinión sobre la suspensión y cuestionó la evaluación inicial del estado del terreno. Pérez expresó que el diagnóstico de la cancha debió haberse realizado de forma más temprana para poder anticipar la cancelación y evitar demoras innecesarias para los jugadores y el público. “Creo que debió haberse hecho la evaluación temprano para poder determinar si el juego podía realizarse”, comentó. Agregó que la lluvia había dejado el campo “blando y con mucho barro”.
La transmisión internacional del evento estaba programada para ser vista a través de ESPN, y la suspensión del juego se considera comprensible en el contexto de preservar la seguridad de los jugadores. Pérez resaltó la importancia de cuidar a los prospectos y jugadores que pertenecen a organizaciones de béisbol. “Hay prospectos y jugadores que pertenecen a las organizaciones, y nosotros tenemos que preservar por ellos”, enfatizó el gerente, subrayando la responsabilidad que implica la preparación del campo.
Para mantener el calendario de la liga, se anunció que la fecha se reprogramará con un doble header entre los Caimanes y Leones. Sin embargo, este doble header no se llevará a cabo al día siguiente, ya que el estadio albergará un juego entre Caimanes y Tigres. Se prevé que la doble jornada se programe en el siguiente encuentro entre Caimanes y Leones, en una fecha que será comunicada por la liga.
A medida que avanza la liga profesional, se espera que el próximo juego, programado entre Caimanes y Tigres, pueda desarrollarse sin inconvenientes. Los seguidores de los Caimanes y Leones tendrán la oportunidad de ver a sus equipos en acción en la próxima doble jornada, en una cita que promete reactivar la emoción de la temporada, compensando en parte la suspensión del día de hoy.